Esto que viene a continuación es un reblogueo de mí mismo. Más o menos. Quiero decir, que reblogueo un post de El magacín, donde han colgado un relato de fantasmas. Fantasmas, pero con una lección.
Os invito a visitarlo, un webzine muy variado y ameno, que le deis a los iconitos de las redes sociales y todas esas cosas que tan felices nos hacen a los blogueros.
¡Que lo disfrutéis!
Llovía a mares. Contemplando las gotas repiqueteando contra el cristal, Sara pensó que las nubes estaban descargando esa tarde todo lo que se habían guardado…
Origen: Relato: Coraje
Creo que tiene, éste estupendo relato, una base perfecta para que puedas sacarle más jugo, en mi caso le daría un par de vueltas, aunque siempre les doy una docena sin que me guste el resultado. Un abrazo.
Es lo que tienen los escritos, que nunca parecen estar bien terminados. Los revisas una vez, y encuentras cosas. A la segunda, otras. En la tercera ocasión, más todavía… Y podrías seguir y seguir y nunca soltarlo al mundo, pero hay que hacerlo y dejar que sea libre 🙂
Es cierto que podría desarrollarse más sobre todo el final (como Mau dice, es abrupto), pero es lo que tiene estar constreñido a un número de palabras máximo para poder entrar en el concurso (para ello estaba destinado cuando se escribió)
ME GUSTO BASTANTE MUY BIEN RELATADO
Gracias por tus palabras, por pasarte, leer y comentar. Confío en seguir teniéndote por aquí 🙂
A MI TAMBIÉN ME GUSTA QUE COMENTEN SOBRE MI BLOG, INCLUSO SI NO GUSTA
No te preocupes, lo haré 🙂
Me ha encantado el relato, intrigante y con una temática muy actual por desgracia. Un abrazo.
Efectivamente, por desgracia. Creo que escribir terror (o fantasía) no significa despegarnos de la realidad, cumplir una función meramente evasiva.
¡Muchísimas gracias por comentar!
A mí me ha gustado mucho! Cierto que el final un poco precipitado tal vez, pero muy buen relato. Enhorabuena!
Me alegra que te haya gustado :).
La precipitación, que reconozco, es debida a que quise centrar el foco no en el enemigo en sí, sino en la acción que viene a ser una metáfora del empoderamiento frente a la violencia. Consideré que estirar la acción podría diluir ese aspecto y opté por cortar.
Aunque me parece a mí que os haré caso, me dejaré guiar por vuestras indicaciones, y en un futuro reharé la parte final. Un Coraje 2.0.
Lo esperamos impacientes!
Muy buen relato, como te comenta Mauricio, un poco apresurado el final, seguramente porque es tan grata lectura que sabe a poco.
Y es que se me ha hecho muy corto. Un abrazo.
¡Muchas gracias, Estrella!
Me habéis convencido, en serio. En un futuro, lo revisaré y reescribiré alargándolo y haciendo el final más suave 🙂
!!Muy bueno es el relato!!
Me alegra que te haya gustado 😉
Lo cierto es que, como en algún comentario se ha hecho, el final es un tanto abrupto, debido a la necesidad de ceñirme a un número de palabras máximo, pero algún día a lo mejor lo cojo de nuevo y pulo el final.
¡Gracias por comentar!